Faltan 71 días....

...Para el gran evento... y no porque sea grande en magnitud, sino porque para mi es lo más importante...

Muchos se han preguntado por qué para mi es tan especial la piñata de mis hijas que comienzo a planificarla cuando estamos entregando los recuerditos del año anterior... pues bien, aquí les va la explicación...

Durante mucho tiempo (20 años, para ser exacta...) ayudé a mis hermanas a decorar la fiesta de sus hijos (aunque pensaron que era Lola... no... era yo...) y cada vez que me tocaba hacerlo me daba cuenta de lo mucho que disfrutaba cortando papel crepé y papel de seda...

Llegó el tiempo en que deseaba con todo el corazón hacerle una piñata a mis propios hijos... mucho tiempo soñé con eso... y después de un largo camino (que todos conocen) nacieron mis Bendiciones: María Carlota y María Cristina...

Cuando mis hijas cumplieron el Primer año disfruté un montón haciendo flores, en el segundo pegando Mickeys en el suelo, en el tercero Elmo y las Ni Fu Ni Fa llenaron la casa de Nina y Papapa, el cuarto lo celebramos como lo que mis hijas son: todas unas princesas, y el quinto, llenamos la casa con la magia de Campanita y del Mago de Oz (que es la foto que hoy comparto con Ustedes)

Es una ocasión muy especial para mí, porque además de celebrar un año de más felicidad, le doy gracias a Dios por haberme dado las fuerzas necesarias para luchar por mi sueño: Mis Hijas... para agradecer a todos los que me acompañaron en esa lucha y para celebrar dos vidas hermosas...

Por todo eso y mucho más, ese día es mágico para mi... y ya estoy recortando coronas y flores y soñando con la cara de mis niñas cuando lleguen Troy, Gabriella y Sharpay a bailar con ellas...